Después de que 200 monjes jainistas (considerada unas de las religiones más respetuosas con los animales), se declararon en huelga de hambre para demostrar que preferían su propia muerte antes de permitir la explotación y consumo de animales, en el 2014 el gobierno prohibió por ley la matanza de animales, además de la comercialización, crianza, y consumo de carne de res, pescados y huevos. Los lácteos aún no están prohibidos.
Decisión que a muchos dejo contentos, y a otros obviamente no. Los que profesan otras religiones no están nada de contentos y en desacuerdo con la medida. Han llevado al Tribunal Supremo sus alegatos, indicando que el estado no tiene derecho a controlar la dieta de las personas. Aluden, además a que esta medida afecta profundamente a los pescadores y productores de la zona que vivían del negocio de la carne.
También se suman a estos alegatos los musulmanes que viven en Palitana que quieren seguir consumiendo carne.
Difícil medida, la verdad difícil. ¿Cómo dejar contentos a todos? ¿cómo llegar a un acuerdo que beneficie a todos, incluidos los animales?
Pensar en que se dejará de comer carne no es más que un bonito sueño…, pero mejorar las condiciones de los animales para consumo, ¡¡es nuestro deber!!. y aquí sí que hacen falta nuevas normas, reglamentos y leyes para todo aquel que está en el negocio de criar un animalito para consumo.
Pero siempre habrá un grupo descontento con las medidas que se tomen…,a pesar de que cada vez hay más alternativas, medidas e iniciativas para veganos y vegetarianos alrededor del mundo. Como lo han hecho en Barcelona y Turín, donde se han unido muchos restaurantes y comercio en general para brindar una alimentación “veg-friendly”, pero sin prohibir ni perjudicar el negocio carnico. En especial de los pequeños productores, o de los trabajadores de la industria carnica.
Insisto, difícil tema pensando en todos los involucrados. Animales, los que comen o no algún tipo de carne o derivados, la industria dedicada a la venta de carnes, pescados, huevos, lácteos, al pequeño productor, trabajadores, familia, económica, religión, creencias, política, estilo de vida, moda, medio ambiente…, por ahora llegar a un consenso lo veo difícil…, las futuras generaciones tienen un gran trabajo por delante, pero ver pequeños cambios, como lo de la bolsa plástica, las bombillas, el reutilizar, reciclar… es un valorado grano de arena.
Lo difícil es “TOMAR CONCIENCIA”, “EDUCAR”, ¡¡y respetar todas las tendencias alimentarias es más difícil aún!!, y más difícil todavía, ¡¡qué no se vuelva solo un negocio!!
No voy a preguntar ¿qué opinas? Los veganos considerarán que es una buena medida, los carnívoros, que es una medida excesiva, y vuelvo al principio, ¿¿cómo ponernos de acuerdo?? ¿¿cómo “hacemos” para que todos nos veamos beneficiados sin causar daño a los animales, al medio ambiente y a nosotros mismos??
¡Buen finde!🤗